"De Mauricia a Daniela: Cinco Generaciones de Mujeres en Villaseca de la Sagra"
Descubre las Historias de Cinco Generaciones de Mujeres en Villaseca de la Sagra
En honor al Día Internacional de la Mujer, queremos compartir contigo una entrevista única y emotiva que captura la esencia de cinco generaciones de mujeres en nuestra comunidad. Desde los 98 años de Mauricia hasta los 3 añitos de Daniela, estas mujeres han vivido diferentes épocas y han sido testigos de la evolución de nuestra sociedad.
En esta entrevista, cada una comparte sus vivencias, sus historias y las diferencias notables entre cada generación. Desde los cambios en la sociedad hasta las tradiciones familiares, estas mujeres nos ofrecen una perspectiva profunda y conmovedora de cómo la vida y las experiencias han evolucionado a lo largo del tiempo.
Un Homenaje a la Fuerza y Sabiduría de las Mujeres de Villaseca de la Sagra
Te invitamos a leer esta entrevista que es un tributo a la fuerza, la sabiduría y el amor de las mujeres de Villaseca de la Sagra. Descubre cómo han marcado el pasado y el presente de nuestra comunidad con su valentía y determinación.
¡Feliz Día Internacional de la Mujer a todas las mujeres de Villaseca de la Sagra y del mundo entero!
Primera Generación (Tatarabuela): Mauricia Aguado Gómez
La vida de Mauricia Aguado Gómez, a punto de cumplir 98 años, es un relato tejido con hilos de amor familiar, resiliencia y generosidad. Desde sus humildes comienzos hasta el presente, Mauricia comparte con profundo cariño y gratitud la historia de su familia, un tesoro que ha perdurado a lo largo del tiempo. Su mayor orgullo es ver a sus hijos, nietos, bisnietos y tataranieta crecer y prosperar, transmitiendo valores de bondad y trabajo arduo. A través de las generaciones, ha cultivado un corazón grande y generoso, dejando un mensaje atemporal de amor y compasión para las futuras generaciones de su familia y para el mundo que la rodea.
P: ¿Cuántos hijos tienes?
R: Tengo tres hijos, Angelines, Francisco y Pedro que está en Algeciras, por este lado espero otra bisnieta que se llamará María Isabel.
P: ¿Qué puedes decirnos de tu familia?
R: Que puedo decir, que tengo una familia muy buena, preciosa y muy cariñosa, los quiero muchísimo y me los meto en el corazón. Quiero que sean muy buenos y de buen corazón como ha sido mi familia. Me enorgullezco de tener una familia muy hermosa, trabajadora, buena y honrada.
Nací en una familia de corazón grande, con muchas necesidades y es uno de los valores que considero que tengo, un corazón grande.
Fui muy feliz en mi matrimonio con Paco. Trabajamos juntos en el campo, Enfermó de bronquios por tabaquismo y ahora no está con nosotros. Era muy guapo y muy bueno, quería tener un recuerdo para él. Le quería más que a mis ojos.
P: ¿Hay alguien especial en tu familia?
R: Pues que quiero mucho a mi familia y a todos por igual, no desigualo a ninguno. Soy muy feliz con ellos.
Aunque pueda parecer que por edad o por pequeños, puedas querer a unos más que otros, los quiero por igual. Quiero a mis hijos, a mis nietos, bisnietos a mi tataranieta porque son míos, han nacido de mí y los quiero por igual a todos. Yo no los he parido, pero he parido al primer ser y de ese ser ha venido la evolución de la que disfruto ahora.
P: ¿Tienes algún recuerdo de tu infancia?
R: Algunos miembros de mi familia, mis tíos, mi padre, mi abuelo con 73 años junto a otros 20 hombres por tener buen corazón murieron, se los llevaron en el 36.Lo tengo clavado en mi corazón. Recuerdo que mi abuela Mauricia, que se llamaba como yo, me decía “Mauricita, perdona que Dios perdonó y hay que perdonar”, en eso estoy yo en perdonar, pero no se olvida.
P: ¿Cuál es tu mayor logro o lo que más te enorgullece en tu vida?
R: Estoy muy orgullosa de tener a una familia como la que tengo. Ver a mis hijos, nietos, bisnietos y tataranieta Daniela crecer y salir adelante es mi mayor logro.
P: ¿Hay alguna mujer en particular, dentro o fuera de tu familia, que haya sido una inspiración para ti?
R: Tengo un recuerdo especial de mi tía.Nos dejaron en la calle como trapos, con todo tirado y mi tía, soltera,nos arrebaño cosas para poder dormir hasta que nos pudimos arreglar.
P: ¿Cuál ha sido el mayor cambio que has visto en tu vida desde que eras niña hasta ahora?
R: Ahora está muy bien, he trabajado muchísimo pasando muchas necesidades en la casa que estaba, no solo para mí para mucha gente también, fue la peor época de mi vida. Ahora veo mucho cambio, veo a la gente más feliz. Se necesita mucho más para vivir, pero lo veo mucho mejor.
P: ¿Hay algún consejo o mensaje que quieras dejar para las generaciones futuras de tu familia?
R: Mucho amor para el ser humano. No tengo nada para el ser humano, pero si tuviera, no me quedaría sin hacer la caridad. Hago lo que puedo, tengo una pensión bajísima de haber trabajado en el campo, he trabajado muchísimo, con muchas necesidades, viviendo con pan y naranja en algunos momentos, pero si pudiera lo haría sin dudarlo.
Segunda Generación (Bisabuela): Mª Ángeles Hijosa Aguado
La vida de Mª Ángeles Hijosa Aguado, de 76 años, es un relato de perseverancia y amor familiar que ha atravesado generaciones. Desde su temprana edad, con aspiraciones de estudiar enfermería, hasta dedicarse con pasión a la costura, Mari Ángeles ha enfrentado desafíos con valentía y determinación. Recuerda con nostalgia las reuniones familiares en su casa, una tradición que consideraba muy especial y que añora en los tiempos actuales de distanciamiento. Como mujer, destaca los desafíos de realizarse como madre y valora profundamente el amor hacia sus hijos y nietos.
P: ¿Cómo era tu relación con la generación anterior en comparación con la que tienes con la siguiente?
R: Veo que la relación con la generación anterior era mucho más cordial y amena que la que tenemos ahora. Antes estábamos en la calle, todos juntos, no daba igual estar en la calle, dentro de la casa, nos reuníamos y teníamos una cordialidad familiar, ahora veo esa relación más fría.
P: ¿Cuáles eran tus aspiraciones y sueños cuando eras joven?
R: Mi aspiración era haber estudiado enfermería, pero por desgracia solo pude ir a la escuela hasta los ocho años. Luego me puse en un taller a coser y sigo cosiendo con 76 años. Al no poder estudiar enfermería, decidí dedicarme a la costura, y si me quitaran esta oportunidad, sería un golpe muy duro para mí. Es mi ilusión, prefiero dejar de hacer otras cosas y quédame en mi casa cosiendo o leyendo.
P: ¿Hay alguna tradición familiar que sea muy especial para ti?
R: Cuando nos reuníamos toda la familia en mi casa para la fiesta. Mis tíos, mis primos, los amigos, la familia, etc. Hoy hemos perdido esas costumbres, pero para mí era una cosa muy grande cuando nos reuníamos todos en mi casa.
P: ¿Qué desafíos enfrentaste como mujer en tu época?
R: Mis desafíos han sido realizarme como mujer y como madre, lo que más valoro es haber tenido a mis dos hijos, aunque podría ser más cariñosa con ellos, son mi vida. Mis hijos, mis nietos y mi pinturita.
P: ¿Qué consejos o lecciones importantes has transmitido a las generaciones más jóvenes?
R: Lo que puedo comentar es que estudien, que se formen, que saquen bien su trabajo y que tengan fe y esperanza.
P: ¿Cuál es el cambio más importante que has presenciado en la vida de las mujeres desde tu juventud?
R: He presenciado un cambio muy grande. Antes las mujeres estábamos en el hogar todo el día, atendiendo al marido y a los hijos y hoy se está de otra manera, la mujer trabaja más, porque trabaja en la casa y fuera, tenemos más libertad, pero estamos más esclavizadas, yo lo veo así. Hay muchos maridos que quieren que trabajen las mujeres, pero luego no se acuerdan que las mujeres también tienen que atender la casa y se tendrían que responsabilizar más. Yo no considero feminista pero la libertad la tenemos que tener todos por igual, tanto el hombre como la mujer y hacernos cargo todos de todo.
Veo que la mujer a avanzado mucho, en ciertos aspectos hasta demasiado, pero veo que las exageraciones no están bien, cada cosa en su nivel.
P: ¿Qué consejo le darías a la siguiente generación para mantener unida a la familia?
R: Que la generación que viene detrás de mí, que se adaptarán uno a otros y que nadie sobresaliera sobre nadie sino todos por igual y que se hiciera el esfuerzo y el trabajo de unirse más para salir adelante todos juntos.
Rumi, de 50 años, comparte con afecto y nostalgia sus recuerdos familiares, destacando los momentos especiales con su abuela, abuelo y bisabuela en el campo durante San Marcos, una tradición que atesora en su corazón. Como madre, busca transmitir a sus hijos valores de formalidad y colaboración, instándoles a ayudar a otros sin abusar de ello. Entre las tradiciones familiares que le gustaría mantener viva, destaca el día de la Madre, honrando el papel único y especial de las madres en la vida familiar.
P: ¿Cuál es tu recuerdo favorito de pasar tiempo con tus abuelos?
R: Tengo muchos recuerdos con mi abuela, abuelo y mi bisabuela porque tuve la suerte de conocer a mi bisabuela. Cuando era San Marcos, nos íbamos toda la familia con mis abuelos al campo, íbamos con los tractores a pasar el día juntos y esos recuerdos son muy bonitos para mí.
P: ¿Qué valores familiares intentas transmitir a tus hijos y nietos?
R: Me gusta transmitir a mis hijos que sean personas formales, lo primero y que, si pueden ayudar a otras personas, que ayuden. Yo soy una persona muy colaboradora y me gusta que mis familiares lo sean también, pero sin abusar de ello, por supuesto.
P: ¿Qué tradiciones familiares relacionadas con las mujeres te gustaría mantener viva y por qué?
R: Me gustaría mantener vivo el día de la Madre, porque la madre es la madre, madre no hay más que una.
P: ¿Cuál es la lección más importante que has aprendido de tus padres y abuelos?
R: Me han sabido educar para ser una persona responsable, tener respeto sobre todo con las personas mayores. Soy auxiliar de enfermería, he trabajado en la residencia y atender a las personas mayores me hacía tratarlos como si fueran algo de mí, incluso más que si fueran mi familia
P: ¿Quieres dar algún consejo a la siguiente generación para mantener la unidad de la familia?
R:Pues que sean un poco más responsables, que ahora no lo son demasiado y con eso conseguiremos unas familias más unidas.
Cuarta Generación (Madre):Ángela del Cerro Pomares
Ángela del Cerro Pomares, de 25 años, nos ofrece una mirada fresca y reflexiva sobre la historia y tradiciones familiares que la han moldeado. Sorprendida por la resiliencia y determinación de sus abuelos, Ángela valora profundamente la lección de que la familia es lo primero, transmitida por su bisabuela Mauricia.
P: ¿Qué es lo más sorprendente que has aprendido sobre las generaciones anteriores a través de sus historias?
R: Me sorprende la capacidad de adaptación y la determinación de mis abuelos. A pesar de los desafíos, siempre encontraron una manera de salir adelante.
Me han transmitido que la familia es lo primero. Mi abuela Mauricia me explicaba las vivencias de su época y puedo decir que ha habido un cambio muy importante en la sociedad, estando acostumbrada a la manera de vivir de ahora no sabría si sería capaz de vivir en sus condiciones.
P: ¿Qué tradiciones o costumbres familiares te gustaría continuar con tus propios hijos?
R: Me gustaría seguir celebrando el día de la madre, pero igual que el día del padre y que no tendríamos que hacer de menos.
P: ¿Cuál es tu recuerdo más preciado de momentos en familia?
R: Recuerdo que me quedaba muchas veces con mi abuela Mauricia en un rinconcito especial que tenia en su casa. También recuerdo cuando mi iba con mis abuelos al monte que me sacaban de paseo para que me durmiera.
P: ¿Qué diferencias ves en las mujeres de tu generación en comparación con las generaciones anteriores?
R: Creo que las mujeres de mi generación están desafiando más los roles tradicionales y están tomando papeles más activos en la sociedad. Estamos haciendo oír nuestras voces y marcando la diferencia.
Las generaciones anteriores vivían en peores condiciones y el trabajo que realizaban en el campo era mucho más duro que ahora, sobre todo en condiciones climatológicas adversas como el verano y el invierno. Ahora tenemos otro tipo de comodidades, trabajamos igual, pero en otras condiciones.
P: ¿Has visto algún cambio en la sociedad desde que eras adolescente hasta ahora que eres madre?
R: Cada vez los veo más “despendolaos”, yo también. Ahora las mujeres somos más impulsivas, independientes, hacemos cosas a una edad más temprana y no pedimos permiso como se hacia antes. Ahora nos dan permiso antes para hacer cosas y en muchas ocasiones las hacemos directamente sin pedirlo. Ahora que soy madre no pido tanto permiso a mi madre para hacer cosas, pero sigo pidiéndoselo como costumbre.
Quinta Generación (hija): Daniela
Daniela Martín del Cerro, una encantadora niña de 3 años, nos comparte con entusiasmo sus gustos y vivencias. A Daniela le encanta pasar tiempo con su abuela, quien tiene muchos "trastos" en casa que son sus juguetes favoritos, como un castillo y un caballo, y también le llama la atención que su abuela se pinte los ojos de color verde.
P: ¿Qué es lo que más te gusta de tu abuela?
R: Tengo muchos trastos en casa de mi abuela. Tengo juguetes, un castillo y un caballo. También se pinta los ojos de color verde.
P: ¿Y con tubisabuela?
R: Me enseña a coser, me ha hecho unos vestidos y un osito con agujas.
P: ¿Cuál es tu juguete favorito?
R: Me encanta la Patrulla Canina y tengo la torre de control. También tengo una tablet de corazones para jugar, se parece a una tele, pero es de mi mamá.
P: ¿Te gusta leer?
R: Si, me gusta mucho el cuento La Paloma.
P: ¿Te gusta ir al cole?
R: Si, voy al de mamá. Mi profe se llama Marimar y me dice que tengo unas zapatillas muy feas porque tienen cordones.
P: ¿Tienes muchos amiguitos?
R: Si, tengo dos amigas. Se llaman Sofia y Anais. Jugamos en la arena con cubos.